miércoles, 28 de julio de 2010

Torbellino de emociones

Ayer fue un dia que es de los que no se olvidan facilmente. Estaba realmente mal por el tema de la separación. Recibí un sms de mi ex pidiendome algo con los crios y terminé por llamarla. La verdad es que la conversación terminó como el rosario de la aurora, y la verdad es que no me explico porqué. Objetivamente no había razón para ello, pero por desgracia, el corazón tiene razones que el raciocinio no es capaz de entender.

Me quedé echo polvo. Me pasé una hora llorando a moco tendido, lo cual me vino muy bien para depurar la tensión acumulada. Hablé con un familiar para desahogarme más. Y cada vez veo más claro que el tema no tiene solución. Es así, quiera o no quiera. El corazón lo tengo destrozado, pero la cabeza sabe que no hay más cera que la que arde.

Por la noche decidí salir a tomar una copa para despejar mi cabeza. Hacía un calor tremendo aún a las 10 de la noche. Me senté a tomar una copa y a leer un periódico. Tuve la suerte increíble de entablar conversación con una persona muy muy entrañable que hace 4 años pasó por una situación parecida. Me ayudó increíblemente a entender a mi ex en sus sentimientos. No estoy de acuerdo en su apreciación de la realidad, pero empiezo a respetarla. Con todo el dolor que ello supone de aceptación de la situación. Digo aceptación emocional, porque racionalmente ya lo había hecho con anterioridad.

Creo que la gente tiene razón y tengo un derecho vital a intentar ser feliz. Por mí mismo, sin depender de nadie. Y a dejar serlo a mi ex. Es evidente que conmigo no lo será, y seguramente, yo con ella tampoco.

Solo espero que la separacion de papeles no termine por ser una guerra. No podría soportarlo. Bastante tengo con intentar salir adelante.

Gracias, jinjan, por la velada. Eres un sol.